Fue en San Javier, Córdoba, en junio del 2008. En el Molino Aguada, de mis viejos amigos, Andrea Chiocca y Luis Boletti. Un curso intensivo realmente inolvidable. Por lo interesante y también por la calidez humana de la "profe" (Andrea) y la belleza del entorno.
Aprendimos la técnica del fieltro húmedo, con lanas rústicas de la región, con top de lana merino, con fibras de llama... También incursionamos en el fieltro agujeado.
Experimentamos el teñido con tintes naturales, en su mayoría procedentes de plantas recolectadas en la zona. El contacto con un material mórbido y dúctil como la lana, impulsa a la creación de formas planas, texturas y volúmenes.
Crear y modular el color a través del teñido y la mezcla de fibras, me reconectó con mi antiguo amor: la pintura. El fieltro fue una nueva dimensión para experimentar el color, las texturas, los volúmenes... Volví con ganas de iniciar un camino nuevo.